BadBox se ha consolidado como una seria amenaza cibernética, afectando a más de 30.000 dispositivos Android y Smart TVs en todo el mundo, según informes recientes de expertos en ciberseguridad. Este malware, inicialmente reconocido por sus ataques a dispositivos inteligentes, ha evolucionado y ampliado su alcance, aprovechando vulnerabilidades previamente desconocidas en sistemas operativos Android y televisores inteligentes.
se infiltra principalmente a través de aplicaciones descargadas desde fuentes no oficiales, así como mediante enlaces maliciosos distribuidos a través de correos electrónicos de phishing y mensajes en redes sociales. Los usuarios desprevenidos que instalan estas aplicaciones comprometidas se exponen a riesgos graves, convirtiéndose en objetivos de robo de datos, espionaje y posibles intentos de extorsión.
La nueva versión de BadBox no solo roba información personal, sino que ha desarrollado capacidades avanzadas que le permiten tomar el control de funciones esenciales de los dispositivos afectados. Entre las acciones más alarmantes, este malware es capaz de activar micrófonos y cámaras sin el conocimiento del usuario, facilitando la vigilancia remota y el acceso no autorizado a conversaciones y entornos privados.